Hace treinta y ocho años, en estas fechas, los estudios de TVE en Esplugues de Llobregat (Barcelona) hervían de actividad. Todo estaba preparado para grabar la adaptación de "Salomé" de Oscar Wilde a la televisión. Atención al equipo involucrado en este acontecimiento audiovisual: Nuria Espert de protagonista, Sergi Schaaff de director-realizador y Terenci Moix transformando el texto del inglés en una obra netamente televisiva. El resultado llamó la atención de la crítica, entre otras cosas, por su realización novedosa, basada en la repetición de travellings audaces, con la propia Espert montada en la grúa, como una especie de presencia fantasmal intangible para sus súbditos... hasta que pisaba el suelo. Una iluminación nebulosa, casi lechosa, daba a la escenografía un aire onírico que recalcaba aún más esa atmósfera que quería impregnar Moix en la conocida obra teatral para hacerla más moderna, para que hubiera paralelismos con la España de la Transición pero no demasiado evidentes.
Grabada en catalán originalmente, la expectación por la presencia de una estrella del teatro como Nuria Espert, que se prodigaba muy poco en televisión, y por la campaña realizada por los críticos a su favor consiguió que se doblara (por el mismo equipo actoral) para emitirse en todo el territorio unos meses después. Por supuesto, sólo una minoría de la audiencia disfrutó de una propuesta tan arriesgada, una minoría que por entonces significaba varios millones de espectadores.
En el primer número del año 1977 de la revista TeleRadio aparecía en portada la protagonista, y eso que todavía no se había confirmado que la obra se podría ver en toda España; esto nos da una idea de la importancia que se le daba a la intervención de la prestigiosa actriz. De hecho, no es arriesgado afirmar que si no fuera por su presencia y apoyo a Terenci y Schaaff, esta obra no habría visto la luz. Aprovechaba entonces Espert para pedir que se potenciara más la programación en catalán y justificaba su desconfianza al género teatral televisivo: "El teatro ha sido escrito, hecho y pensado para la presencia viva del actor ante el público. En cuanto pasa a través de un aparato pierde mucho. Cada medio tiene sus exigencias y sus ventajas".
Grabada en catalán originalmente, la expectación por la presencia de una estrella del teatro como Nuria Espert, que se prodigaba muy poco en televisión, y por la campaña realizada por los críticos a su favor consiguió que se doblara (por el mismo equipo actoral) para emitirse en todo el territorio unos meses después. Por supuesto, sólo una minoría de la audiencia disfrutó de una propuesta tan arriesgada, una minoría que por entonces significaba varios millones de espectadores.
En el primer número del año 1977 de la revista TeleRadio aparecía en portada la protagonista, y eso que todavía no se había confirmado que la obra se podría ver en toda España; esto nos da una idea de la importancia que se le daba a la intervención de la prestigiosa actriz. De hecho, no es arriesgado afirmar que si no fuera por su presencia y apoyo a Terenci y Schaaff, esta obra no habría visto la luz. Aprovechaba entonces Espert para pedir que se potenciara más la programación en catalán y justificaba su desconfianza al género teatral televisivo: "El teatro ha sido escrito, hecho y pensado para la presencia viva del actor ante el público. En cuanto pasa a través de un aparato pierde mucho. Cada medio tiene sus exigencias y sus ventajas".
En el papel de Juan Bautista Enric Majó (pareja por entonces de Terenci Moix y cómplice de sus trabajos de la época) representaba "la santidad furiosa y alucinada, asediada por el deseo de Salomé". Herodes era interpretado por Felipe Peña (voz fundamental del doblaje español durante décadas) y Heredías (la mujer adúltera) por Conchita Bardem.
"Salomé" se puede ver en la web rtve.es en su sección de dramáticos en catalán.
Fotos: Juan Cid para TeleRadio
"Salomé" se puede ver en la web rtve.es en su sección de dramáticos en catalán.
Fotos: Juan Cid para TeleRadio